¿Qué son?
Mediante la historia clínica, la exploración y los estudios específicos pueden conocerse los factores externos causales y las alteraciones bioquímicas, microbiológicas y genéticas causales, con el grado de oxidación-inflamación del organismo.
La valoración básica para conocer dichas alteraciones causales se realiza en consulta en la primera visita y consiste en:
- Historia clínica minuciosa.
- Cuestionarios sobre los factores externos causales: alimentación, nutrientes, tóxicos, fármacos, radiaciones, actividad física, sueño y estado psíquico.
- Cuestionarios sobre síntomas y tendencias patológicas.
- Exploración física.
- Estudio básico que incluye: glucemia, ECG, espirometria, oximetría, estudio de la masa grasa y muscular, entre otros.
- Estudio mediante bioimpedancia de la masa corporal magra, masa celular corporal, masa grasa, grasa visceral, agua extracelular, agua intracelular y ángulo de fase, entre otros parámetros, para ayudar a conocer y controlar: el daño celular, el estado clínico, el pronóstico y la respuesta al tratamiento.
- Estudio alérgico básico mediante pruebas cutáneas a diversos alergenos respiratorios y alimentarios.
- Valoración de los análisis y las pruebas médicas que aporta el paciente.
- Solicitud de análisis específicos, a través del seguro médico privado o público de la persona.
En la gran mayoría de pacientes es suficiente esta valoración básica para conocer la causas principales y poder aplicar con eficacia el adecuado tratamiento micronutricional y complementario que controle el exceso de oxidación-inflamación y ayude a la reparación y regeneración de los tejidos y órganos dañados.
En ciertos casos puede ser necesario completar la valoración con estudios como:
- Estudio de ácidos grasos omega 3, 6, 9, saturados y trans en las células.
- Estudio de otros micronutrientes.
- Estudio de moléculas tóxicas.
- Estudio de metales tóxicos: mercurio, plomo, cadmio, aluminio…
- Estudio de enzimas digestivas.
- Estudio de microorganismos en tejidos.
- Estudio de alergia, sensibilidad e intolerancia alimentarias.
- Análisis de anticuerpos contra agentes infecciosos: virus, bacterias, hongos y protozoos.
- Poligrafia cardiorrespiratoria.
- Estudio de contaminación por radiaciones: niveles de los diferentes tipos de radiación en domicilio y/o lugar de trabajo.
- Estudios genéticos: mutaciones, polimorfismos, perfiles genéticos… para conocer las predisposiciones a tendencias patológicas y enfermedades, y también la respuesta a fármacos.