¿A quién puede ayudar?

Un método que puede ayudar a muchas personas. El Método Dr. Cardona ha sido diseñado para ayudar a cualquier persona que padezca patologías crónicas comunes. Es eficaz para conseguir una mejor calidad de vida, también en la edad avanzada. Este método no diagnostica enfermedades ni interfiere con los tratamientos indicados por el especialista sino que es coadyuvante de las terapias aplicadas y no debe substituir a los diagnósticos, fármacos, terapias y controles indicados por el médico, siendo complementario de todos ellos.

Una mayoría de personas sin enfermedades y todas las personas con patologías cronificadas, presentan niveles insuficientes de varios metabolitos nutricionales y niveles excesivos de otros. Y restituir el equilibrio micronutricional es una acción medica esencial  para evitar enfermedades y también para conseguir su remisión parcial o completa cuando ya se han manifestado.

El Método Dr. Cardona mejora la salud de las personas con patologías crónicas comunes:

  • Varias de las siguientes tendencias patológicas: aumento de la grasa abdominal (exceso de cintura), aumento de la presión arterial (hipertensión), alteraciones del colesterol y/o de los triglicéridos (dislipemia), aumento del ácido úrico (hiperuricemia) y/o aumento del azúcar (hiperglucemia).
  • Enfermedades metabólicas y sus complicaciones: diabetes tipo 2 y sus complicaciones neurológicas, cardiacas, renales y oculares…
  • Enfermedades cardíacas: coronariopatías, miocardiopatías, valvulopatías, arritmias, insuficiencia cardiaca…
  • Enfermedades vasculares periféricas: insuficiencia venosa, varices, claudicación intermitente, Raynaud…
  • Enfermedades cerebrovasculares: ictus…
  • Enfermedades respiratorias: asma, bronquitis, EPOC, fibrosis pulmonar, apneas del sueño, insuficiencia respiratoria…
  • Enfermedades digestivas: reflujo gastroesofágico, gastritis crónica, colon irritable, colitis ulcerosa, hepatitis crónica, cirrosis, pancreatitis crónica…
  • Enfermedades renales: insuficiencia renal crónica…
  • Enfermedades reumáticas: dolor crónico, artrosis, osteoporosis, fibromialgia, fatiga crónica…
  • Enfermedades endocrinológicas: hipotiroidismo, hipertiroidismo…
  • Enfermedades neurológicas: cefalea crónica (migraña), neuralgia crónica, demencia, Alzheimer, Parkinson, polineuropatías…
  • Enfermedades oculares: pérdida de visión por diversas causas, glaucoma, degeneración macular…
  • Enfermedades dermatológicas: dermatitis, acné, rosácea…
  • Enfermedades psíquicas: depresión, ansiedad, TDAH, neurosis, psicosis…
  • Enfermedades alérgicas cutáneas, respiratorias, digestivas…
  • Enfermedades infecciosas por virus, bacterias, hongos o protozoos.
  • Enfermedades autoinmunes: artritis, psoriasis, lupus, esclerodermia, Crohn, Sjögren, esclerosis múltiple…
  • Enfermedades oncológicas: cáncer en diversos órganos, leucemia, linfomas…

Advertencias

  • Si su médico le ha aconsejado una alimentación o unos complementos específicos, debe seguir sus indicaciones.
  • Si sigue el método, su médico debe valorar la evolución de los procesos patológicos que padece y decidir las terapias y pautas de fármacos a seguir.
  • Las personas en tratamiento con los anticoagulantes acenocumarol (Sintrom®) o warfarina (Aldocumar®), deben realizarse un control de la coagulación (INR) y de las dosis de estos fármacos por su médico.
  • Las personas en tratamiento con insulina, deben controlarse la glucemia y las dosis de insulina por su médico.
  • Las personas con insuficiencia renal crónica avanzada deben seguir la alimentación indicada por su nefrólogo.
  • Si una persona ha presentado alergia, sensibilidad o intolerancia a alguno de los componentes de un alimento básico o complemento básico, no debe tomarlo.